Síntomas

Los síntomas por lo general incluyen espasmos musculares, exceso de baba, pupilas poco claras (mirada fija) y pérdida de funciones corporales lo que resulta en la orina y/o en la defecación espontánea. Todo el cuerpo puede tensarse y sacudirse y puede generar pérdida de la conciencia.

Causa

Los ataques epilépticos se pueden causar por distintos factores como un tumor cerebral, una infección, sustancias tóxicas y azúcar baja en sangre. En algunos casos la causa se desconoce. Los desórdenes epilépticos se pueden heredar. Los pastores alemanes que sufren de desórdenes epilépticos no se deben cruzar ya que la condición se puede pasar a los cachorros.

Convulsiones en grupo

Los pastores alemán son propensos a sufrir convulsiones en grupo, lo que significa que pueden sufrir varios ataques epilépticos en un corto periodo de tiempo. Esto es peligroso e incluso puede amenazar la vida del perro. Si ocurren 3 o más ataques epilépticos en un periodo de 24 horas, debes llamar inmediatamente al veterinario.

Diagnóstico

El diagnóstico de un ataque epiléptico puede incluir una serie de análisis como de sangre, de orina, niveles de toxinas, rayos X y electroencefalograma (EEG, por sus siglas en inglés) para medir la actividad eléctrica del cerebro.

Tratamiento

El tratamiento para los desórdenes epilépticos pueden depender de la causa subyacente. Los ataques epilépticos se pueden controlar con medicamentos como el Dilantin, el fenobarbital y el Valium. El tratamiento para pastores alemán se debe comenzar lo más pronto posible ya que el control de estos ataques en esta raza de perro en particular a menudo se dificultan. Los pastores alemán no siempre responden al fenobarbital que es el medicamento que más se receta. Aunque no existe cura para la epilepsia canina por lo general se controla a través de la medicación. Una vez que se ha recetado un anti convulsivo es importante que reciba la dosis recomendada.

Advertencia

Si tu pastor alemán sufre de ataques epilépticos no pongas tus manos en o cerca de su hocico. Te puede lastimar involuntariamente mordiéndote mientras sufre el ataque. No intentes moverlo ya que te puedes lastimar o lastimar al perro. Quita los objetos que haya cerca como bases, mesas, lámparas o cualquier otra cosa con la que tu perro se pueda lastimar durante el curso del ataque epiléptico.