Cómo conservar cáscaras de naranja

Conserva las cáscaras de naranja secándola o congelándola.

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La cáscara de naranja agrega color y un sabor ácido a los productos horneados, salsas y otras recetas. Aunque usar la cáscara de naranjas frescas y maduras produce un sabor y color óptimos, puedes secar o congelar la cáscara de naranja para usarla en el futuro. La próxima vez que tengas abundancia de naranjas frescas, prueba uno de estos métodos para conservar la cáscara en lugar de tirarla. Usa las cáscaras secas o congeladas en tus recetas favoritas como lo harías con el producto fresco.

Secar la piel de naranja

Step 1

Lava las naranjas con agua fría, usando tus manos para frotar suavemente la superficie de cada fruta.

Step 2

Usa un cuchillo para quitar 1/8 pulgada (3 mm) de cáscara de la fruta y córtala en segmentos de 2 pulgadas (5 cm).

Step 3

Precalienta tu deshidratador a 135 grados Fahrenheit (57 grados Centígrados). Dispón los segmentos de cáscara sobre la bandeja de secado separadas por alrededor de 1 pulgada (2,5 cm) con la cara cortada hacia arriba. Coloca la bandeja en el deshidratador.

Step 4

Cada una hora controla las cáscaras para comprobar si están secas retirándolas de la bandeja y cortándolas por la mitad. Los segmentos están lo suficientemente secos cuando no puedes ver o sentir humedad dentro de ellos. Este proceso puede tardar hasta 12 horas dependiendo de la clase de naranja que uses.

Step 5

Retira la bandeja del deshidratador. Deja enfriar los trozos por completo antes de acondicionarlos y guardarlos.

Step 6

Acondiciona las cáscaras de naranja colocándolas en un frasco transparente de plástico o vidrio y dejándolas reposar por siete días. Agita el frasco todos los días para separar los trozos de cáscaras. Este paso asegura que todas las piezas estén secas por igual y evita el crecimiento de moho.

Step 7

Guarda las cáscaras de naranja en un frasco hermético o bolsa plástica. Retira la mayor cantidad de aire posible del contenedor antes de cerrarlo. Usa la cáscara de naranja seca exactamente como la usas frescas en las recetas.

Congelar piel de naranja

Step 1

Lava las naranjas con agua fría. Usa el cuchillo para quitar la capa más externa de la cáscara, dejando la membrana blanca.

Step 2

Corta la cáscara en secciones. Como alternativa puedes usar un rallador de queso o de cítricos para rallar la cáscara en ralladura fina.

Step 3

Coloca la piel o la ralladura en bolsas plásticas herméticas. Quita el aire de la bolsa y consérvala en el congelador hasta que estés listo para usar el contenido.

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