Step 1

Deja al cachorro con el resto de la camada hasta que tenga al menos ochos semanas de edad. Los cachorros aprenden mucho sobre la inhibición de la mordida entre las cuatro y las ocho semanas, por lo que retirarlo de la camada antes de este momento podría provocar serios problemas de aprendizaje. Los perros de razas grandes, como los golden retriever, tardan más en madurar y necesitan pasar ese tiempo con sus hermanos de camada para que su desarrollo sea el adecuado.

Step 2

Juega con tu cachorro para que haga bastante ejercicio. Los cachorros suelen mordisquear por aburrimiento o frustración; un cachorro que desarrolle mucha actividad física es menos probable que lo haga. Los golden son activos y los cachorros suelen necesitar de dos a tres horas de ejercicio al día para poder quemar el exceso de energía.

Step 3

Dale a tu cachorro algún juguete resistente para que lo mastique cuando comience a morder los objetos que no deba. En origen, los golden retriever fueron criados como perros perdigueros deportivos y, por ese motivo, muerden los objetos por instinto. Cuando muerda algo que no deba morder, dile "No muerdas" con voz firme y sustituye el objeto que sea por su juguete. Repite el proceso cada vez que coja algo que no esté permitido y aprenderá a morder sus propios juguetes.

Step 4

Aléjate del cachorro cuando te muerda durante el juego. En la camada, los cachorros se muerden entre sí jugando y es posible que el tuyo haga lo mismo contigo, su nuevo compañero de camada, cuando estés jugando con él. En cuanto intente mordisquearte dile en voz alta "¡Ay!" y retírate. Vuelve en un par de minutos y juega de nuevo con él, pero vete cada vez que te muerda. Pronto aprenderá que cuando mordisquea se detiene el juego y abandonará ese mal hábito.