Olor de horno nuevo

Los hornos nuevos a menudo emiten un olor a quemado singular cuando los enciendes las primeras veces. Esto es resultado de una capa protectora en el quemador. Debería irse después del segundo uso del horno.

Restos de comida y grasa

Al cocinar alimentos en el horno, estos pueden burbujear o gotear sobre los quemadores o el piso del horno. Si no limpias esto inmediatamente después del uso, aún estará ahí la próxima vez que uses el horno, y comenzará a quemarse con el tiempo. Lo mismo se aplica a la grasa, la cual puede ser más difícil de ver. Tu horno puede lucir limpio, pero toda capa de grasa en el interior puede quemarse al calentarse el horno.

El tope del horno

La comida o grasa no tienen que estar dentro del horno para producir mal olor. A veces se derraman sobre las planchas de goteo y debajo también. Cuando calientas tu horno a alta temperatura, estas también se pueden calentar.

Animales muertos

Aunque los culpables en general son la comida y grasa, a veces un pequeño animal como un roedor se muere detrás o abajo de tu horno. Esto puede producir un olor constante, el cual empeorará al calentarse el horno, calentando a su vez los restos del animal.

Limpieza

La mayoría de los hornos eléctricos tienen una opción de auto limpieza. Esta calienta el horno a temperaturas muy altas, por encima de 750 °F (400 °C). Al calentar, la comida y grasa dentro del horno serán reducidas, creando un muy mal olor. Este es amplificado si no has limpiado el horno en un largo tiempo. Si tu horno tiene esta opción, no es recomendable en general limpiarlo con limpiadores de horno comerciales. Pero si los usas, también pueden dejar un residuo dentro del horno que producirá un fuerte olor al calentarse.