Riego

La albahaca requiere de un suelo bien drenado y húmedo. Si el suelo no drena bien, los charcos de agua alrededor de las raíces y la planta de albahaca recibirán demasiada agua, dando lugar al marchitamiento de las hojas. Del mismo modo, cuando se seca el suelo y las hojas no reciben suficiente agua, estas se marchitan y se arrugan.

Pestes

Las babosas y los pulgones son depredadores de albahaca y harán que las hojas de las plantas se arruguen y se marchiten. Puedes saber si las babosas han llegado a las plantas de albahaca por la presencia de restos de senderos de limo en las hojas. Mantén las babosas lejos cubriendo con corteza. Los pulgones seguramente infesten una planta de albahaca. Puedes eliminarlos rociándolos con jabón insecticida.

Clima

La albahaca requiere veranos calurosos y temperaturas cálidas constantemente. El primer signo de una helada va a matar a una planta por completo. En las zonas con noches frías de verano u otoño, lleva las plantas de albahaca al interior para protegerlas del frío.