Step 1

Decide de qué color te gustaría pinta tu refrigerador. Si tu objetivo es cubrir las rayaduras, elige un color que sea parecido al que tiene ahora. Para un cambio total de aspecto, encuentra un color que se complemente con la decoración de la cocina. Solo asegúrate que la pintura sea adecuada para utilizar sobre metal.

Step 2

Limpia el área externa del refrigerador para remover cualquier suciedad o residuo que se pueda haber acumulado con el tiempo. Puedes utilizar algún tipo de limpiador doméstico que tengas a mano. Seca el refrigerador utilizando un trapo suave, antes de continuar con el siguiente paso.

Step 3

Lija toda la superficie externa con un papel de lija de grano fino. Continúa lijando hasta que todo el brillo de la pintura original se opaque. Este paso le dará una mejor superficie de adherencia a la pintura nueva.

Step 4

Enmascara todas las áresa del refrigerador que no quieras que se afecten con la nueva pintura. La cinta de pintor funcionará mejor porque se adhiere bien, y es muy fácil retirarla cuando terminas con el trabajo.

Step 5

Vierte algo de pintura de esmalte brillante en la bandeja para pintura, y comienza a colocar la primera capa de pintura con un rodillo de esponja. Pinta toda la superficie usando, incluso, pinceladas y deja que la pintura se seque. Aplica un capa adicional si es necesario.

Step 6

Retira la cinta del refrigerador después de que la pintura se haya secado completamente. Para mejores resultados, deja que la pintura se asiente toda la noche y retira la cinta en la mañana.