Servir al público

Los sectores público y privado idealmente sirven a los intereses públicos. El sector privado está comprometido con los inversores y accionistas, que depende de las ventas a los clientes para ejecutar negocios rentables. El sector público está en deuda en su totalidad con el público de una manera más transparente, proporcionando servicios e infraestructura esenciales.

Competencia

En el sector privado, las empresas que prestan los mismos servicios y productos están de forma natural en competencia, y el objetivo del libre mercado para varias corporaciones es obtener el dominio sobre las otras. En el sector público, ciertos tipos de entidades compiten de manera similar, como escuelas y clínicas de salud pública.

Jerarquías

Los líderes, administradores, gerentes y trabajadores existen en todos los niveles de gobierno. En el ámbito privado, existen estas jerarquías departamentales y especialidades, excepto que con algunos nombres ligeramente diferentes. Estos tipos de estructuras organizativas son más eficientes al momento de delegar trabajo en las grandes organizaciones, por lo que no es de extrañar que sean similares.

Errores

El error común de las organizaciones públicas y privadas suele ser el exceso de burocracia, lo que hace que las organizaciones sean menos eficientes y más apegadas a las reglas y la politiquería. Esto hace que las organizaciones estén desfasadas y estancadas.