Diferencia entre salmos e himnos

Los salmos se escribieron y cantan para alabar a Dios.

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En Efesios 5:19, el apóstol Pablo anima a los primeros cristianos a que "Hablen entre vosotros con salmos, himnos y canciones espirituales. Canten y alaben en vuestro corazón al Señor". Debido a que el apóstol menciona estos tres elementos por separado, muchos se preguntan si existen diferencias significativas entre los himnos y salmos, cuando en realidad técnicamente ambos son tipos de canciones espirituales para alabar a Dios. Las diferencias pueden ser puramente de semántica y es posible encontrar sus definiciones en la Escritura, de donde se originan.

Salmos

El nombre hebreo para el libro de "Salmos" en la Biblia es "Tehilim", que significa alabanzas. El verso poético de esta colección de escritos fue tanto un testimonio de la historia de Israel como un libro sagrado de canciones de alabanza para el pueblo de Dios. En el Antiguo Testamento figura el rey David como el autor de 73 salmos y, como un hábil ejecutante de la lira, se puede deducir que acompañaba estas canciones con música instrumental cuando los usaba en el culto.

Himnos

Los himnos, por otra parte, pertenecen a una definición más amplia. El significado literal de un himno es "un canto de alabanza y acción de gracias a Dios o una deidad". Mientras que los salmos son considerados por su inclusión en la Biblia como palabra inspirada de Dios, los himnos son canciones creadas por seres humanos para ser usadas en la adoración. Algunos himnos se basan en los salmos de la Biblia, pero no se limitan a las escrituras sagradas como los escritos de autores como el Rey David, el Rey Salomón y Moisés.

Versos modernos tradicionales

Las iglesias y ceremonias religiosas modernas permiten que la congregación participe en el canto de himnos, pero este no fue siempre el caso. Antes de la Reforma, los Salmos se cantaban o coreaban principalmente por el clero, y no siempre se utilizaban instrumentos musicales. Algunas iglesias reformadas u ortodoxas modernas siguen sin permitir que los instrumentos acompañen los salmos o himnos en los actos de adoración más formales. A medida que se permitió a los miembros de las congregaciones participar en las canciones de adoración, también se comenzaron a utilizar instrumentos para crear un "sonido jubiloso para el Señor" a través de éstos.

Culto emocional

Los cantos de alabanza y acción de gracias, salmos e himnos no sirven sólo como una forma de adoración a Dios, sino también como una manera de cambiar las propias emociones a pesar de las circunstancias. Algunos de los salmos fueron escritos para reafirmar la fe. Tal es el caso del muy utilizado Salmo 23, que reafirma la confianza en Dios en medio de un conflicto con la frase: "Sí, aunque ande en un valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo".

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