Step 1

Haz una cita con tu médico para asegurarte de que estás sano y puedes someterte al riguroso plan de dieta de 21 días. La mayoría de los seguros de salud cubren parte de los costos. Infórmale al médico que te someterás a un agresivo plan de pérdida de peso.

Step 2

Prepara un plan de comidas que incluya tres comidas y un bocadillo por día, sumando un total de 1200 calorías. Esto es lo más bajo que puedes llevar tu ingesta diaria calórica. Hacer este plan y escribirlo te ayudará a mantenerlo, así que sé específico en cuanto a las porciones y tacha las comidas que vas comiendo cada día. Asegúrate de conseguir las colorías de alimentos ricos en nutrientes, como carnes magras, lácteos descremados, frutas y vegetales, en lugar de desperdiciarlas en comida chatarra. Si sigues este plan, puedes perder dos libras (2,26 kg) por semana.

Step 3

Comienza un entrenamiento cardiovascular diario. Correr, andar en bicicleta o hacer clases de aeróbicos o spinning son buenas opciones y queman alrededor de 0,29 libras (0,13 kg) por día. Esto hará un total de 6 libras (2,72 kg) al mes.

Step 4

Agrega una hora más de entrenamiento cada tres días. Al quemar otras 0,29 libras dos veces por semana, agregarás otras 2 libras (0,90 kg) a la pérdida de peso.

Step 5

No comas almidón. Estos alimentos, como patatas, arroz, pan y pasta, absorben el agua del cuerpo, haciendo que retengas peso. Si lo eliminas completamente de tu dieta, puedes perder casi 6 libras (2,72 kg) de peso en agua en un par de días.