Cómo cultivar un olivos a partir de la semilla

João Correia, Public Domain, Wikimedia Commons

El olivo es parte de la familia de Oleáceas y es una planta nativa del área de las costas del Mediterráneo. Los olivos son un hermoso agregado en cualquier jardín o ambiente de interiores y puede cultivarse de manera relativamente fácil a partir de una semilla (el carozo de la aceituna). Sin embargo, es importante observar que la mayoría de los olivos que se cultivan a partir de semilla no servirán de manera óptima para dar frutos, sino tan sólo como árboles decorativos.

None

Coloca una fina capa de abono dentro de algún tipo de vaso poco profundo y coloca las semillas en la superficie. Después de colocarlas, humedece bien toda la mezcla con un rociador.

Mantén la mezcla húmeda, pero no empapada, y en un lugar cálido que reciba bastante luz del sol. La germinación puede tardar varias semanas, sólo sé paciente y conserva la germinación en óptimas condiciones regándola constantemente y en temperaturas cálidas estables.

Apenas germinen (comiencen a brotar), trasplanta las semillas a una maceta con tierra arenosa de rápido drenaje. La preparación adecuada para la tierra es mezclar 1 parte de tierra abonada común con tres partes de tierra abonada para cactos. Agregar arena extra a la mezcla ayudará, pero no debería superar más del 5% de la tierra total.

Riega los brotes abundantemente y colócalos en un lugar cálido y soleado. Durante la etapa inicial es mejor continuar con el cultivo del olivo en interiores para protegerlo, incluso si las condiciones al aire libre son cálidas.

Poda las hojas inferiores del árbol cuando comience a crecer para estimular el crecimiento vertical y para que se desarrolle como un árbol y no como un arbusto.

Riega el olivo sólo cuando la tierra se sienta seca al tacto. Asegúrate de que se mantenga cálido y de que reciba luz del sol.

eHow en espanol
×