Step 1

Ponte un par de medias hasta la rodilla o hasta la pantorrilla que se ajusten a la altura de tus botas. El buen ajuste de las medias es importante si quieres evitar que las botas se arruguen. Jálalas todo lo que puedas.

Step 2

Coloca la cinta de doble cara (del mismo tipo que usarías para mantener un vestido de espalda abierta en su lugar) en la parte de arriba, afuera de las medias. Coloca un pedazo en el frente, uno atrás y uno en cada lado.

Step 3

Ponte las botas de la misma manera en la que te pusiste las medias. Jálalas casi hasta arriba y después presiona la parte interior de las botas contra la cinta.

Step 4

Frota la parte de arriba de las botas con las palmas de tus manos. La cinta evita que las botas se resbalen y se arruguen en los tobillos.