Step 1

Elige cortes gruesos en lugar de angostos; al menos de una pulgada (2,5 cm) de grosor de ser posible. Incluso las costillas de cerdo con un poco de grasa son menos propensas a que se seque el hueso, donde está la parte sin grasa de las chuletas. El corte del centro de las chuletas es el más tierno.

Step 2

Marina las chuletas de cerdo antes de asarlas usando tu salsa marinada preferida, como con salsa de soja y azúcar rubia. Deja remojando las chuletas en la marinada durante toda la noche.

Step 3

Recubre las chuletas en el empanado, usando tu receta preferida en lugar de marinarlos. Rompe un huevo y cubre la carne con éste antes de empanarla.

Step 4

Remoja las chuletas en la salmuera como una alternativa a la marinada y al empanado. La salmuera se hace con agua, sal, azúcar y algunas otras especias que le agregan sabor a la carne. Remojar las chuletas de cerdo en salmuera hará que se hinchen con agua y se mantengan tiernas, y serán menos propensas a secarse durante la cocción.

Step 5

No sobrecocines las chuletas. Todas las bacterias se morirán cuando la temperatura interior de las chuletas alcance los 160 ºF (71 ºC). Algunas personas prefieren el cerdo ligeramente rosado a una temperatura de 150 ºF (65 ºC). A esta temperatura la triquinosis se muere, pero no la salmonela.