Step 1

Llena la olla con agua, agrega unas cucharadas de sal y deja reposar durante toda la noche. Si la comida todavía está pegada, prueba hirviendo la mezcla de agua salada durante unos minutos. Esto debería aflojar aún las manchas más rebeldes.

Step 2

Echa un poco de bicarbonato de sodio y vinagre. Mézclalos con un poco de agua y deja que repose. Luego lava la olla como siempre.

Step 3

Rocía la olla con limpiahornos. Como la cerámica es similar al horno, los limpiahornos en aerosol a menudo sirven también. Deja que repose un poco y frota y enjuaga como de costumbre.

Step 4

Agrega detergente en polvo para lavavajillas. Cubre el fondo con el polvo y luego cubre todo con un paño tibio y húmedo durante unas horas. Esto debería eliminar cualquier comida pegada.

Step 5

Utiliza el truco de las toallitas para secadora. Pon una toallita de suavizante para secadora en el fondo de la olla y cúbrela con una fina capa de agua tibia. Deja reposar durante unos 30 minutos y mira cómo el pegote quemado sencillamente se desliza.