La globalización promueve la interdependencia

A medida que la economía se contrae en los países desarrollados y se expande en los emergentes, los individuos y las empresas se han vuelto más conscientes de su interdependencia en la economía mundial. Las empresas que desean competir y sobrevivir en el siglo 21 tienen que reconocer que el crecimiento depende de la creación de nuevos mercados y la comprensión de sus electores. Las alianzas culturales permiten a las empresas entrar en los mercados extranjeros bajo la dirección y liderazgo de los participantes veteranos, lo que minimiza las posibilidades de conflicto y el fracaso.

La diversidad habilita el empoderamiento

Los dueños de negocios han adoptado desde hace mucho tiempo el entendimiento de que múltiples puntos de vista mejoran la toma de decisiones. Cuando se contrata con los mercados exteriores, es conveniente contar con un equipo de culturas e idiomas diversos para ayudar a los individuos a evaluar el entorno competitivo de la empresa, desarrollar el producto y la estrategia de marketing y ejecutar las ventas en ese país. Estas acciones demuestran una preocupación sincera por las comunidades beneficiarias y la sensibilidad de los consumidores.

Marginación de las acciones entre los participantes

La libertad de expresión es un agente de empoderamiento contra el conflicto y la ambigüedad. El conocimiento cultural acerca de un individuo o de su cultura puede crear empatía, sin embargo, la capacidad lingüística permite a los participantes expresarse claramente y eliminar obstáculos, percibidos y conocidos que fomentan la desconfianza y la ansiedad. Esto puede contrarrestar los intentos de promover el poder coercitivo a través de la retórica multicultural que no aborda los problemas sistémicos que discriminan a los participantes por sus etnias, como señaló Jim Cullins en su investigación de la diversidad cultural y lingüística en el mundo académico.

El crecimiento intelectual y académico

La diversidad cultural y lingüística en equipo promueve el crecimiento académico mediante la eliminación de los factores de disuasión de las relaciones interpersonales e intergrupales. Las personas que se afirman en la comodidad de su identidad están facultadas para expresarse con confianza. En las aulas y ambientes de trabajo, estas expresiones desafían las ideas y puntos de vista de los demás, extrayendo y perfeccionando las soluciones que se infunden y sazonado con el talento de una sociedad más amplia.