Actividades infantiles con arándanos

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A mucha gente cuando piensa en arándanos, solo le llega a la mente el platillo de acompañamiento en la cena de Acción de Gracias. Son una parte del banquete, y nadie piensa en ellos hasta el próximo año. Los arándanos tienen muchos más usos que acompañar al pavo, tanto dentro como fuera de la cocina. Intenta usar arándanos en actividades divertidas para niños, y ellos nunca volverán a ver estos pequeños frutos rojos de la misma manera.
Juegos de arándanos
Créelo o no, un arándano crudo es durable y tiene una piel resistente, haciéndolo un alimento propio para jugar. Organiza una carrera de relevos, donde cada participante deba equilibrar varios arándanos en una cuchara, mientras se arrastran de un lado a otro del cuarto. Si al jugador se le cae un arándano, debe volver a empezar. También puedes llevar este juego afuera de la casa. Puedes jugar baloncesto de arándanos haciéndolos botar en vasos de plástico. Este es un gran juego que aleja a los niños de comportamientos negativos asociados con el aburrimiento. Dale a cada jugador el mismo número de arándanos y su vaso de plástico. El primer jugador que haga botar todos sus arándanos en el vaso gana. Puedes también intentar adaptar un clásico: pescar arándanos. Los arándanos frescos tienen un recoveco con aire que los ayude a flotar, así que dale a cada jugador un recipiente grande lleno con agua y de 10 a 20 arándanos. La primera persona que saque todos los frutos del recipiente utilizando solo su boca gana. Este juego no es para niños muy pequeños.
Arándanos en la cocina
Utilizar los arándanos con creatividad en la cocina le puede enseñar a tu hijo lecciones de cocina, colocando al arándano como el ingrediente del día. Los arándanos secos son una excelente fuente de nutrición y los puedes utilizar para recetas cotidianas, como rellenos, pastelillos o gelatina. O bien, usálos para alimentos horneados y prepara muffin de nuez con arándano, pan de plátano con arándano, postre de frutas con arándano, bollos de arándano o galletas de avena con arándano. Añade jalea de arándano a un pastel de varias capas, o parte por la mitad a un pastel ya hecho y agrega cucharadas de jalea de arándano en medio. Vuelve a juntar las dos mitades del pastel. La jalea de arándano en el yogur es sabrosa, igual que el jugo de arándano combinado con jugo de naranja. Busca recetas de arándanos en tu libro de cocina, o crea tus propias recetas.
Arándanos en cadena
Puedes encordar arándanos con una aguja e hilo para hacer pulseras o collares. Corta el hilo al largo deseado y hazle un nudo al final. Con cuidado, inserta la aguja de costura a través del centro de los arándanos, uno a la vez, y acóplalos en el hilo hasta que quede lleno. Haz un nudo en el otro extremo y usa tu cadena como joyería o trenzas decorativas para adornar tu casa. Es necesaria la supervisión paterna para enseñarle a tu hijo a ensartar arándanos, para evitar que se piquen los dedos. Si tienes un hijo demasiado pequeño para usar una aguja, tú mismo perfora los arándanos y dáselos para que él sólo los acople al hilo. Esta es una cómoda actividad que le enseña a tu hijo como convertir objetos cotidianos en cosas de gran utilidad o decoraciones de hogar.
Guirnalda de arándanos
A tu hijo le encantará hacer decoraciones festivas a partir de arándanos y ramas de pino. Este trabajo se termina en minutos y decorará la entrada de tu casa durante todo el invierno. Llena una olla redonda con agua y echa los arándanos, ramas o helechos en la superficie. Coloca la olla en el congelador hasta que se haga hielo el agua. El tubo cilíndrico al centro de la olla hará un agujero en el hielo, creando una apariencia de guirnalda. Una olla redonda con un cuenco apuntando hacia abajo en el centro también hará un hoyo en el hielo, y si es necesario, podrá ser sustituido por una olla en forma de flauta. Una vez solidificado, coloca la olla en un lavabo lleno de agua tibia el tiempo necesario para que se afloje el hielo y sacarlo. Ten cuidado de que no se derrita. Amarra un listón de 3 a 4 ft (1 a 1.5 m) de largo y 3 in (7.5 cm) de ancho o una tira de trapo a través del hoyo en el hielo, centrando la guirnalda en el listón o el trapo. Asegura los extremos sueltos haciendo un nudo, o amárralo en la rama de un árbol robusto o de un poste metálico. También puedes utilizarlo como centro de una mesa exterior, siempre evitando la luz solar. Se quedará hecho hielo tanto como la temperatura lo permita. Si se derrite, le dará alimento a los pájaros o ardillas.
Sobre el autor
Victoria Georgoff has been writing professionally since 2007. Her articles have appeared in "The Journal of Sexual Medicine" and "The Encyclopedia of Sex & Society." A dually-licensed mental health counselor, with additional EMDR certification, Georgoff specializes in writing about parenting, education, sexual health and psychology, but also writes prolifically on many other topics. Georgoff holds an Master of Arts in counseling from Valparaiso University.
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