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El helado de leche cremoso es fácil de hacer y seguro que les gustará a todos. Con solo unos pocos ingredientes, puedes batir este delicioso postre para tus niños o para una fiesta veraniega con amigos. Tiene un menor porcentaje de grasas que la mayoría de los helados, lo que lo convierte en una alternativa sabrosa y saludable.
Paso 1
Vierte el azúcar, la sal, el extracto de vainilla y ambos tipos de leche en un recipiente mezclador grande. Revuelve para mezclar bien todos los ingredientes.
Paso 2
Cubre el recipiente con una tapa o film plástico. Colócalo en el refrigerador por 30 minutos, lo que permitirá que la mezcla se espese.
Paso 3
Retira la mezcla del refrigerador y viértela en una asadera. Coloca la asadera en el congelador y deja reposar por aproximadamente tres horas.
Paso 4
Retira la asadera del congelador y coloca la mezcla en la licuadora. Licua hasta obtener la consistencia adecuada y disfrútalo.
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- No dudes en agregarle ingredientes como chispas de chocolate o almendras para darle más sabor a este postre.
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