Temperatura de congelador

Los fabricantes de refrigeradores saben que la mayor parte de las cosas que las personas congelan tienen una temperatura de congelación menor que la del agua, que se congela a 32 grados Fahrenheit (0 grados Celsius). Los congeladores de casa deben mantener a la mayoría de las cosas que las personas almacenan congeladas (no sólo muy frío). El congelador doméstico medio debe variar entre -10 grados Fahrenheit y 0 grados Fahrenheit (-23 a -17 grados Celsius). Si no estás seguro de la temperatura de tu congelador, usa un termómetro para medir el frío que hace.

¿Por qué la graduación importa?

La graduación se refiere a la cantidad de alcohol en el licor. Por ejemplo, cuando el alcohol es de 60 de graduación, significa que el licor se compone de 30% de alcohol. El resto es agua aditivos, azúcar y sabor. La temperatura de congelación de alcohol de grano puro es -173,4 grados Fahrenheit (-113 grados Celsius). Así que agregar alcohol al agua disminuye la temperatura de congelación de la mezcla.

Bebidas de alta graduación

Las bebidas alcohólicas que son de graduación 64 (o 32% de alcohol) se congelan a -10 grados Fahrenheit (-23 grados Celsius), mientras que la graduación 84 (42% de alcohol) se congela a -30 grados Fahrenheit (-34 grados Celsius). Si el congelador está suficientemente frío, el licor de graduación 64 podría congelarse en él, así que es mejor almacenar este tipo de bebidas en la parte más fría del refrigerador. Sin embargo, si estás seguro de la temperatura de tu congelador y sabes que no baja de los -5 grados Fahrenheit (-20 grados Celsius), por ejemplo, puedes ser capaz de mantener tu licor de 64 allí.

Bebidas de baja graduación

El licor de graduación 24 (o 12% de alcohol) se congela a 20 grados Fahrenheit (-6 grados Celsius), por lo que la cerveza, vino, bebidas de malta y otras bebidas alcohólicas de baja graduación se congelarán en la mayoría de los congeladores domésticos. Mientras que te apegues a un congelador que se enfríe más rápido que la refrigeración en la nevera, si te olvidas de ellos y los dejas en el congelador demasiado tiempo, van a congelarse. Y debido a que el agua se expande cuando se congela, las bebidas alcohólicas de baja graduación congeladas con frecuencia harán que tus envases se rompan o exploten (la tapa puede saltar o una botella débil puede romperse completamente).